¿Cómo hacer una presentación de calidad?
Tres tips valiosos para ensayar la presentación de un tema importante.
Maegan Stephens expone una serie de consejos muy útiles para realizar una presentación de calidad, haciendo énfasis en la impotancia de ensayar para conseguir
Cuando se tiene la tarea de realizar una presentación para exponer un tema crucial en un taller o curso, probablemente se invierte mucho tiempo para crearla al cuidar ciertos detalles como que cada palabra sea precisa y fácil de entender, usar imágenes que coincidan con el contenido, así como revisar cada slide para constatar que no falte ningún texto importante o que haya algún error de dedo o de ortografía.
Sin embargo, lo más importante siempre será la forma en que se expone el contenido; hay que recordar que la presentación sólo es una herramienta. Muchas personas se pierden este paso crítico. Se toman días o incluso semanas creando la presentación, pero muchas veces al final de la ponencia existe un cierto grado de frustración; ¿por qué? porque nunca se tomó el tiempo suficiente para ensayar.
Por lo tanto, te recomendamos tres consejos para ensayar la presentación, y así obtener resultados efectivos.
1. Elaborar un ensayo general:
Un ensayo debe practicarse tal y como si se realizara la presentación ante la audiencia. Si se puede, se aconseja programar un horario para practicar en el mismo entorno (o uno similar); de igual manera se recomienda usar la misma tecnología para anticipar posibles complicaciones de carácter técnico que pudieran surigir. De esta manera se llegará confiado y preparado el día de la sesión.
2. Presentar el contenido en voz alta:
Cabe recordar que lo que suena bien en tu cabeza puede no sonar tan bien cuando sale de tu boca; además de esto, existen evidencias sobre el impacto que tiene la lectura en voz alta sobre la memoria. En otras palabras, si se ensaya la presentación en voz alta, habrá mayores posibilidades de que el ponente se sienta mejor y con mayo confianza al recordar los puntos clave del discurso.
3. Usar audiencia simulada:
Cuando se ha practicado suficiente, se recomienda que algunas personas en las que confíe lo observen y le brinden comentarios honestos. Éste público sirve para verificar dos veces el tipo de interacción que se realizará y asegúrarse de que los datos y la información sea fácil de comprender.
La excusa más frecuente que he escuchado es el no contar con tiempo suficiente para ensayar. Hay un número limitado de horas en el día, y puede ser difícil encontrar tiempo para ensayar, pero mientras que algunas presentaciones pueden no requerir mucho tiempo de ensayo, otras sí lo requieren por la magnitud de su importancia; para saberlo contesta esta pregunta ¿Qué es lo que me estoy jugando con esta presentación?
Una vez identificada la importancia de la sesión, se necesita determinar cuánto tiempo dedica a ensayar, por lo tanto aquí hay algunas preguntas más para considerar:
¿Es la primera vez que presenta el material?
¿El contenido es nuevo para ti?
¿Estás nervioso por presentar el material?
¿La audiencia es nueva para ti?
¿Esta audiencia es escéptica de ti o del contenido?
¿La presentación dura más de 20 minutos?
Cuanto más responda “sí” a esas preguntas, más tiempo se requerirá para ensayar.
Conclusiones:
- La exposición de la presentación es mucho más importante que la presentación en sí.
- El no hacer un ensayo previo puede omitir la transmisión de ideas importantes a la audiencia.
- Claramente, practicar antes de presentar es algo inteligente, pero puede que te sorprenda saber que ensayar demasiado puede ser tan peligroso como no prepararte en absoluto.
